El pasado mes de mayo, la Escuela de Hostelería vivió una jornada muy especial en torno a uno de los platos más emblemáticos de nuestra gastronomía: el cocido madrileño y la cofradía del Cocido de la mano de Nacho Sandoval y Mar del restaurante La Bola.
La actividad arrancó con una charla del reconocido crítico gastronómico Nacho Sandoval, quien acudió acompañado por representantes de la Cofradía del Cocido, una entidad dedicada a preservar y difundir la cultura de este guiso tradicional. Durante su intervención, Sandoval repasó la historia y las curiosidades que han convertido al cocido en todo un símbolo de la cocina madrileña, además de reflexionar sobre su papel en la gastronomía actual.
A la charla se sumó la participación de la dueña del mítico restaurante La Bola de Madrid, uno de los templos del cocido en nuestro país. Con su experiencia y cercanía, compartió anécdotas y secretos de la receta que lleva décadas conquistando paladares tanto locales como internacionales.
Pero el momento más esperado llegó con la elaboración del cocido. La dueña de La Bola, junto con los alumnos de la escuela, se puso manos a la obra para preparar este plato cargado de tradición, enseñando a los futuros cocineros los detalles que marcan la diferencia: desde la elección de los garbanzos hasta el cuidado del caldo.
La jornada concluyó con una degustación del cocido, en la que estudiantes, profesores e invitados pudieron saborear el resultado de esta experiencia única. Más que una comida, fue una celebración de la cultura culinaria madrileña y un recordatorio de que la gastronomía es también memoria, identidad y encuentro. Y así los asistentes pudieron degustar de una comida tan nuestra, tan chulapa y tan castiza.
Y por supuesto, no podemos olvidar el momento más emocionante del evento: asistieron chulapos y chulapas con sus mejores galas para bailar un chotis de sorpresa.
Con este tipo de iniciativas, la Escuela de Hostelería reafirma su compromiso de acercar a los alumnos a profesionales de referencia y tradiciones vivas, ofreciendo experiencias formativas que trascienden el aula y conectan directamente con la esencia de nuestra cocina.